Iguales a Franco

La polémica suscitada por los apellidos esta semana, me ha hecho pensar un poco, hasta ahora el único caso en que se había cambiado los apellidos del padre por el de la madre fue para que los nietos de Franco, conservaran los apellidos del “insigne” abuelo, llamándose sus nietos Franco Martínez-Bordiú, por cierto lo de Martínez- Bordiú era una de las formas de la “gente bien” de conservar el apellido de la madre, cuando este era raro, o de rancio abolengo.
Zapatero nos ha hecho iguales a Franco al poder disfrutar de una medida, que el dictador tomo para perpetuar su memoria, al resto de los españoles, como si ya no hubiera hecho lo suficiente para permanecer en la memoria de todos los españoles. Ahora bien llegamos a un mismo fin, por caminos muy diferentes. Si Franco, lo hiso como otro síntoma de megalomanía enfermiza. Zapatero lo ha hecho para demostrar con hechos, la igualdad de los hombres y las mujeres, o lo tengo que decir al revés, de este país.
Lo que no tengo claro, es porque ahora se ha levantado la polémica con los apellidos, pero lo que tenemos que tener claro, que en 35 años hemos pasado de que la mujer para abrir una cuenta en un banco, comprar una lavadora, etc.; necesitaba la autorización del marido, hemos pasado a engrosar las listas del paro en las mismas condiciones que su marido.
Les recuerdo que los apellidos es la forma de saber nuestra procedencia, pero en un país en el que todos tenemos las ”mismas oportunidades”, dejaría de tener sentido ¿No?. El gobierno también a propuesto que los hijos de padres maltratadores puedan cambiárselo. Aunque hay otros casos en los cuáles también se podría aplicar. Los hijos de Díaz Ferrán, se podrían cambiar los apellidos, para que cuando vayan a un banco, por lo menos los dejen entrar. Porque si han heredado del padre, sus virtudes empresariales están aviados.
Juan José Quintana Pérez. C/Luis de Ardila, 19. 11100 San Fernando (Cádiz).Tlno.: 605403963. Email: “jjquinpe@gmail.com”