Carta a Gerardo VIII

Inapreciado Gerardo:
No sé si ya he tratado contigo este tema, pero me da igual, porque no tengo palabras para felicitarte por la jugada, digna de un maestro del ajedrez.
En primer lugar como te has valido de todos, para que sean culpables y al final victimas de tus maniobras, yo no dudo de tu inteligencia, pero creo que simplemente eres un ejemplo de intuición natural, o lo que es lo mismo, una chapuza que te ha salido bien. Empecemos el repaso por cada uno de los personajes, que han participado en tu estafa legal, muchos con su doble papel de cómplices y de victimas.
Empecemos tratado el tema de los trabajadores. Estos eran los primeros que debían de conocer como se desviaba el dinero hacia otras empresas ruinosas, al menos los medianos y altos ejecutivos, la pobre administrativa, que cogía el teléfono, es la única que se puede excluir, pero cuando la empresa mandaba sacar esas ofertas de saldo, los directores de las oficinas debían de sospechar y como aun después de destaparse la crisis, y recibir los mensajes de las empresas que no aceptaban bonos de Marsans, seguían recogiendo dinero de los clientes para unas vacaciones, que sabían que no se iban a realizar. El fin de los trabajadores es evidente, intentar capitalizar a la empresa para que fuera viable, pero la sangría a la que sometiste la empresa, hacia que la empresa fuera inviable. Era como vaciar el mar con un cubo lleno de agujeros. Ahora ellos son la victimas principales de esta estafa legal, porque han perdido un puesto de trabajo, uno de los bienes más preciados de la sociedad actual.
Las empresas finales encargadas de dar los servicios contratados por los clientes (hoteles, Puffmantur..). Cuando el cliente llegaba y la empresa le solicitaba el pago de unos servicios que el cliente había pagado a viajes Marsans, la indignación del cliente era grande, pero tú volvías a quedar en segundo plano. También dependía de la política desarrollada por cada empresa para tratar con el cliente. Por ejemplo había empresas que reclamaron a Marsans, como se desprende de su participación del concurso de acreedores. Pero otras como es mi caso, con Puffmantur , en vez de dar un poco de coba y mano izquierda al cliente, pasaron a la acción directa, si quiere mantener la reserva tiene usted que volver a pagar, tratándonos como auténticos borregos, espero por el bien de este país que hayamos sido más lobos que borregos. La única disculpa que tenían era la que estaba muy nerviosos con las cuentas de resultados de este año ya que Viajes Marsans representa el 60% de las ventas de Puffmantur. Y además del desprestigio de los clientes hacia Puffmantur, que no hayamos caído en su maniobra, porque en la última naviera que yo iría de crucero seria Puffmantur y Royal Caribbean, aunque hay que reconocer que la usaste descaradamente en tu único beneficio, siendo al final tan victimas como los clientes.
Bueno y yo como cliente qué culpa tengo, el haber caído en un timo, cegado por el chollo de un crucero a mitad de precio. Porque me siento como se debe sentir, salvando las distancias lógicamente, como una mujer violada, sintiéndose culpable de algo der lo que no tiene la culpa. Has violado mi credibilidad y confianza hacia las agencia de viaje, a que agencia de viajes voy a ir el verano que viene.
Santander Consumer, también tiene su responsabilidad en la ejecución de la estafa, yo hasta agosto por ejemplo no termino de pagar el crucero, o debía de decir cruz, que es de donde procede etimológicamente la palabra crucero. Su pena será que habrá perdido un cliente, espero que más de uno, hasta la eternidad. Díselo de mi parte al señor Botín, “con el que te llevas tan bien”, que antes pido dinero en la calle, que volver a ser cliente del Santander (no veo la F1 por no ver el anagrama).
Bueno se me olvidaba la victima que ha perdido más de este affaire, tu. Porque en tu megalomanía has perdido Air Comet, seguros Mercurio, Viajes Marsans y no se si poner ponerle etc. O puntos suspensivos. Al final te veo pidiendo que la CEOE, te ponga un sueldo, tú que tanto has criticado a Cuevas por eso, por lo menos el no ha puesto un trabajador en la calle, tu le ganas por goleada.
Bueno pues me despido de ti hasta la próxima con un fuerte abrazo por encima de los hombros.

Juanito

Postdata: Solo le pido a Dios, cinco minutos en un ascensor contigo cabroncete.
Juan José Quintana Pérez. DNI.:32847041M. C/Luis de Ardila, 19. 11100 San Fernando, Cádiz. Tlno.: 655430084. Emails “jjquinpe@gmail.com”